El ministro de Defensa, Edmundo Novillo, debía haberse presentarse en el Pleno del Senado de la Asamblea Legislativa Plurinacional a las 08.30 de este miércoles para brindar su informe oral sobre los 13 radares que no fueron instalados hasta la fecha, pero la autoridad de esa cartera de Estado no asistió a la cita, por cuarta vez consecutiva.
“Quiero denunciar que el Ministro de Defensa se burla de la Cámara de Senadores. El día hoy debería estar presente para dar su informe oral en relación a los radares (…), pero las 08.10 se me informa que el ministro no iba a estar”, condenó el senador de la agrupación Creemos Henry Montero.
El legislador explicó que el 24 de enero solicitaron al ministro de Defensa una Petición de Informe Escrito (PIE) sobre la instalación de los 13 radares de lucha contra el narcotráfico y contrabando, pero no tuvieron respuesta. Después reenviaron la petición de informe con una conminatoria para el 15 de marzo, tampoco recibieron la información solicitada.
El 15 de junio, se volvió a solicitar un informe, pero esta vez una Petición de Informe Oral (PIO) y exigieron que se presente ante la Comisión de Planificación de Economía para el jueves 4 de agosto; sin embargo, la autoridad de Defensa decidió no asistir y tampoco comunicó su ausencia a la cita.
“Qué oculta el ministro de Defensa, cuando nos dijeron que control del espacio aéreo iba a estar cubierto cien por ciento de la lucha contra el narcotráfico. Será que no quiere luchar contra el contrabando y narcotráfico y que no existan los radares con los dineros de los bolivianos, no del MAS, sino de los bolivianos. Es así la forma que se maneja el Ejecutivo seguramente, entre comilla lo digo, está encubriendo el narcotráfico y contrabando”, cuestionó Montero.
Bolivia firmó en agosto de 2016 un contrato por 191 millones de euros (216 millones de dólares) para la compra e instalación de los radares. El proyecto debía completarse en el plazo de 31 meses y estipulaba que los equipos se instalarían en diferentes regiones de Bolivia. Sin embargo, de acuerdo a las últimas declaraciones del ministro, este proyecto no está concluido, pero tiene entre un “90 y 94% de avance”.
“Me queda seguir insistiendo en el informe oral porque mi función no es tumbar ministros, sino tener información y poder argumentar si hay incumplimiento de contrato o de las autoridades nacionales. Voy a insistir que exista una nueva fecha de informe oral”, señaló el asambleísta.
ANF